lunes, 16 de mayo de 2011

GPS incorporado



… y hace un montón que no escribo, y quiero escribir, y puede hasta que tenga cosas que contar, viajes, cuevas, noches, incluso días, vidas nuevas, y no tan nuevas, cosas no mas, historias de ultramar, y después resulta que no me siento, y no escribo y no vomito todo lo que se me acumula dentro, porque no tengo tiempo, y si lo tengo me siento a mirar desesperado como lo pierdo mientras lo miro, y lo pierdo, y lo miro y lo pierdo, y así hasta que el día empieza y acaba como empezó, en la carretera, donde tampoco puedo escribir, porque no tengo portátil, y aunque lo tuviera tampoco tengo más manos, y alguna de ellas en el volante nunca están de más, y pienso que en algún momento debería pararme a pensar hacia donde me lleva el coche, pero entonces caigo en que tengo gps incorporado y que no me debo preocupar por nada solo seguir la flecha que sale en la pantalla, y para cuando me doy cuenta ya estoy perdido, mojado, y es tan tarde que tampoco me puedo sentar a contar al mundo que me he perdido, y entonces es cuando pienso que da igual porque aunque me sentase no sabría qué decir, me iría por la tangente, o simplemente escribiría cualquier mierda tal como esta, y entonces me doy cuenta que no se escribir y que siempre acabo diciendo mierda y que un buen escritor nunca diría “una mierda como esta” así que vuelvo a perder el tiempo y veo la vida pasar a través de la ventana, sin vomitar, acumulando, reteniendo, información que nunca se verterá, ni se derramará, estupideces, muchas malas y alguna peor, tonterías de las gordas que me hacen reír pero que no digo, porque se supone que debe llegar un momento en la vida de todo hombre en que dejes de decirlas no? Y entonces es cuando me deprimo de lo triste de todo en general, pero no me puedo permitir pararme mucho a pensar porque mañana me levanto pronto para ir a trabajar y volver a ser un hombre de provecho que no sabe a dónde va, y que ni siquiera sabe si quiere llegar allí. Inconvenientes de una vida automática, supongo.









Vetusta Morla/ Baldosas Amarillas




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