1996, éramos
jóvenes, éramos libres y el garrafón corría por nuestras venas prepubers como
salvajes ríos escarlata. No entendíamos de ritmos ni de negras y corcheas,
no sabíamos lo que era un diapasón ni lo necesitábamos, el nuestra mente un
pentagrama se usaba para sacrificar jóvenes vírgenes y aun así éramos felices.
Estúpidos y felices como gorrión que lleva el viento, pues conocíamos LA
MAQUINETA. Sí señor, golpes de electrónica cavernaria y macarrónica que nos
aceleraba la patata. Influjos perneros que sodomizaban nuestros instintos más
viles y sucios, testosterona a punto de explotar de un granaco blanquecino y hediondo
en medio mismo de nuestra frente de atolondrado tinager de chichinabo. Brumel a
cascadas, gomina pelopincho, pintas de mongol downer hasta arriba de petazetas
y a engorilar a las nenas. Oh yeah! no se ha visto nada igual desde “Pichiflauntings
y el saqueo al sinfonier” (*). Maquineta de los 90, mana dorado, kínder bueno
de la melancolía, Piponazo extra de sal para el alma, buena mierda.
Skrillex, copia
barata de Chimo Bayo, escucha y llora…
Cominosworld-
Maquineta 90’s
(*)
No hay comentarios:
Publicar un comentario